Ofensiva de la Generalitat: «A partir de la próxima semana ningún aula aplicará el 25% de castellano»
El Gobierno rechazó recurrir la decisión tras acordarlo con la Generalitat en el marco de la última mesa de negociación
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«A partir de la semana que viene [cuando empieza el curso escolar] ningún aula de este país aplicará porcentajes, ningún aula aplicará el 25% de castellano». Es la afirmación que este jueves ha hecho el conseller de Educación de la Generalitat de Cataluña, Josep Gonzàlez-Cambray, en la presentación del nuevo curso escolar 2022-2023 que está a punto de empezar. De esta forma, el Govern desafía al Tribunal Supremo en su catalanización de la educación pública. Todo con el apoyo del Gobierno de Pedro Sánchez, que rechazó recurrir la decisión tras acordarlo con la Generalitat en el marco de la última mesa de negociación.
Cambray ha lamentado que el curso anterior estuvo «marcado por injerencias judiciales». Todo después de que varias familias pidieran la aplicación del 25% de las clases en castellano para sus hijos. Una polémica que tuvo su punto de partida en Canet de Mar con una familia que sufrió todo tipo de amenazas por reivindicar sus derechos. A raíz de eso, otras familias se sumaron a la iniciativa pidiendo, en distintos centros de Cataluña, que parte la escolarización fuese en lengua castellana. Se hicieron cambios legislativos que implicaron la aprobación de un decreto, por parte del Govern, que fija la inaplicación de porcentajes de lenguas en las aulas.
Un decreto que, según el conseller, ha sido «un éxito de país». Según él, ese éxito se debe a que «es lo que pasa cuando se trabaja en la misma dirección al servicio del alumno». Pese a eso, González Cambray ha dicho que esta inaplicación de porcentajes de lenguas no es «suficiente» y quiere desplegar medidas para aumentar aún más el uso del catalán tanto en el interior de las aulas como también en las zonas de entrada y salida del recinto y en los patios. «Nos ponemos a trabajar para incrementar el uso del catalán en los centros y que los proyectos lingüísticos se apliquen en las aulas», ha remarcado durante la rueda de prensa de esta mañana.
El Tribunal Supremo sentenció que el 25% de las clases en Cataluña deben ofrecerse obligatoriamente en castellano. El alto tribunal corroboró la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que, en diciembre de 2020, impuso este porcentaje mínimo como obligatorio en los colegios e institutos catalanes. Un pronunciamiento que convertía el fallo en firme ordenando al Govern garantizar que el castellano sea la lengua vehicular, como mínimo, en el 25 % de las materias. Con el apoyo del Gobierno de coalición, que ha rechazado defender los intereses del Estado y de las familias denunciantes, la Generalitat ha alardeado este jueves de que ningún aula va a aplicar la sentencia.